sábado, 6 de septiembre de 2014
El Valle de los Caídos.
Corría un año cualquiera de las prostrimerías de la Guerra Civil cuando un General Franco triste y meditabundo hizo llamar de inmediato al General José Moscardó a las dependencias del Palacio de El Pardo.
-Que desea su Excelencia??????.
José, déjese de Excelencias llámeme símplemente General o Paco a Secas....... Quiero dar un paseo, con usted, acompáñeme......
Un coche oficial les estaba esperando, su destino sería el Risco de la Cava, a las afueras de Madrid. Así las cosas se dirigieron al tal sitio ambos generales. Uno un héroe, otro un dictador.
-Me gustaría me dijese si este podría ser el lugar idóneo para nuestro negocio.
- General, yo no se de topografía simplemente soy un militar que ha perdido un hijo en la Guerra Civil.
-Bueno... pero es un paraje admirable y muy cerca de Madrid. Sería un sitio magnífico para emplazar a los Caídos por Dios y por la Patria en nuestra gloriosa cruzada.
-Sí, General pero recuerde que no solo los nuestros dieron su sangre por Dios y por la Patria. Piense que perdí un hijo en la Cruzada pero no es menos cierto que no pocos hijos de ambos bandos también perdieron la vida.
-Bueno, bueno.......... su apunte es acertado pero no lejano a la controversia. Tendré que pensarlo.
-General, su obra cuesta 1000 milones de pesetas. De donde va a sacar el dinero?. Repártalo, no estamos como para dilapidar fortunas.
-José, todo se andará, todo se andará. Tengo mis planes y bocetos dibujados por mí mismo. Al final la generaciones venideras lo amortizarán.
Esta podría ser una de las conversaciones que el General Franco y José Moscardó sostuvieron a la hora de elegir el emplazamiento de El Valle de los Caídos. Y es que desde que se inició la Guerra Civil española el General Franco tenía una idea muy clara de como acometer un proyecto el cual aglutinara a los caídos en su cruzada.
En mi humilde opinión en España hay obras farónicas pero de este calibre creo que ninguna. Así las cosas creo que no hay monumento en España que cause tanta admiración a la par que repulsa y es que Franco como simple humano se fue. Pero dejó una gigantesca cripta al estilo de los faraones del Antiguo Egipto. Y es que Franco se creía rey pero no creo quisiese usurpar a Felipe II con el Escorial. No obstante, le faltó poco.
En la Sierra de Guadarrama y en el Valle de Cuelgamuros se erige una cruz, la más grande de toda la cristiandad de más de 150 metros de altura visible a 40 kilómetros de distancia. Bajo la cruz de accede a una solemne iglesia por un corredor de más de 260 metros excavados en la roca viva y de cuyo pasillo se tuvieron que desalojar más de 200.000 metros cúbicos de piedra. Y el conjunto en total ocupa un espacio de 4 campos de futbol.
Antes de seguir con el post y si alguno se siente zaherido por cuestiones, políticas o morales puede cerrar el mismo ya que si bien no voy a ser piadoso con el monumento en cuestión tampoco mis palabras van a ser de condena hacia él. Por añadidura diré todo lo que se y que creo es cierto.
Se empezaron las obras muy pronto, el 1 de Abril de 1940. Como antes he señalado Franco ya había pensado hacía años en acometer tal obra. Así las cosas el otrora Jefe de Estado empezó con ello muy gallito pero he de decir que enseguida hubo que bajarle los humos. Ya que se tardó cerca de 20 años en acabarlo, ni más ni menos que el 1 de Abril de 1959. Tan magna obra la protagonizaron dos famosos arquitectos Pedro de Muguruza y Diego Méndez. Correspondiendo las esculturas a Juán de Ávalos.
Señalar que su primer huesped tuvo el honor de ser José Antonio Primo de Rivera, adalid de Falange e hijo del dictador Miguel Primo de Rivera. Fusilado en Alicante tanto su traslado a El Escorial, como de El Escorial a El Valle fue apoteósico. Wagneriano, diría yo. Sus restos fueron trasladados en todos sus itinerarios posibles a hombros de falangistas. Jamás tocó suelo y por si fuera poco alumbrado con antorchas. Y es que el General Franco sabía muy bien que jugarse los cuartos con la Falange daría al traste con toda la cohesión social que aspiraba en su Movimiento. Falange articulaba social, moral, cultural, política y teóricamente todo lo que Franco anhelaba para España. En esencia y según él "Una Grande y Libre".
Si alguno piensa que el Valle fue construido por esclavos anda bastante equivocado. Y es que había auténticas palizas para apuntarse a su construcción. No esclavos, pero sí obreros especializados los cuales en realidad buscaban como fuera reconciliarse con el régimen y a sueldo. Con lo cual no se puede hablar para nada de esclavitud en su construcción pero sí de circunstancias forzadas. Se calcula que por allí desfilaron del orden de 20.000 trabajadores la inmensa mayoría presos comunes y presos políticos. Y es que un clérigo del cual ahora no me acuerdo acusó vilmente a aquellos infelices aconsejándole a Franco que pagaran con su esfuerzo lo que habían derrochado en sangre. Poco a poco fueron llegando los trabajadores siempre amparados bajo el Patronato de Redención de Penas y poco a poco y dado lo eterno de la obra las costumbres y tensiones se fueron de natural relajando. Se construyeron barracones al lado de la obra y los familiares de aquellos trabajadores iban a visitarlos ante lo cual muchas familias se quedaron a vivir allí ante la flexibilidad del Régimen el cual se daba cuenta de que esa mano de obra era excelentemente válida. Se organizó un perfecto entorno de economatos, enfermerías, y todo lo socialmente necesario para poder vivir a pie de obra sin desplazarse para nada. Dos ilustres familias que allí se asentaron fueron una la de Paco Rabal y otra la Gregorio Peces Barba por solo citar dos ejemplos. Nadie se escapaba y ni ganas tenían. Sencillamente España y sobre todo al inicio de la obra no era sino un inmenso campo de concentración a donde a ningún sitio se podía ir. El único que se escapó de allí fue Sánchez Albornoz y porque lo fueron a buscar en coche ante el estupor de la Guardia Civil que lo dejó marchar por si las moscas sin preguntar "quien vive". Que viniesen a buscar a un preso en coche era algo temeroso para ellos. Así las cosas los criterios de redención de pena fueron los siguientes:
Un año de condena, un año de redención. Se pasó a posteriori a un año de condena por tres de redención y de un año de condena a 5 y hasta 6 de redención.
Y es que queridos amigos Franco tenía todo manga por hombro y no era para menos. Pensad por un momento que en batallas como la del Ebro la gente se rendía de 100.000 en 100.000 y su Excelencia estaba ya harto de presos y de improvisar campos de concentración en mitad del monte con alambradas al estilo del de Los Almendros. También decir que aquellos trabajadores tenían la solaz de José Millán Astray y Terreros Jefe absoluto e indiscutible de la Legión el cual acudía muchas veces a ver a los trabajadores, repartirles tabaco, darles ánimo y soltarles algún rollo en clave patriota. Decir de Millán Astray que merece post a parte. Menudo personaje..... Prometo hacer uno.
Por añadidura, señalaré que El General Franco quiso construir tal opus magnum no en su honor sino en los caídos de la Derecha y que para nada, absolutamente para nada quería que lo enterrasen en el Valle. Recordar y reseñar que Franco era ante todo y sobre todo austero y que no solo eso, él quería que lo enterraran con su mujer Carmen Polo de Franco en El Pardo. Un ejemplo de su austeridad católica y en consonancia con su gran afición, la pesca y la caza es que Carmen y Franco dormían en camas separadas, en mitad y en una mesilla el brazo incorrupto de Santa Teresa. Y su barco, el Azor se caía a pedazos y bastante cutre para un Jefe de Estado. Claro, que por aquel entonces solo barco lo tenían el y Juán March.
También haré hincapié que el entierro de Franco en el Valle fue sugerencia del Ministro de la Gobernación Carlos Arias Navarro, Carmen Polo lo apoyó ya que era íntima de Carlos y que en definitiva las exequias y el sitio para mi humilde opinión no fueron sino un error, como más tarde expondré.
En cuanto a cifras, el Valle inspira unas cuantas. En concreto hay censadas 32.832 víctimas enterradas y... gracias a Moscardó. Por lo que volvemos inherentemente al comienzo de este nuestro post sobre el Valle. Franco se empeñó en hacer un mausoleo solo para caídos de la causa nacional pero muchas familias niegan las exhumaciones. Moscardó lo convence de que en realidad es un edificio para caídos de uno y otro bando por lo que Camilo Alonso Vega a la sazón Ministro de la Gobernación y compañero de academia del General Franco accede a registrar fosas comunes y cementerios para llenar el Valle. La clasificación mortuoria se define de esta forma:
Clase A) Enterrados en iglesias.
Clase B) Enterrados en iglesias o panteones colectivos.
Clase C) En cunetas pero identificadas.
Clase D) En cunetas sin identificar.
Así las cosas, solo los pertenecientes a la clase "A" eran depositarios de autorización familiar. El resto estaban a merced del Régimen. También decir que individuos ilustres tales que Arturo Soria o Calvo Sotelo sus familiares denegaron permiso.
Como anecdotario a la ya larga lista de los que allí pasaron la de más reseña fue la de Justo, el "matacuras". Un individuo enemigo acérrimo al brazo secular. Republicano impenitente, a la sazón estaba rodeado de benedictinos ya que el Valle sita al lado de una abadía benedictina. Le dieron, bien por piedad católica, bien por ducho en manjares el encargo de cocinero. Así las cosas, cada vez que un benedictino pasaba a su diestra o siniestra lo saludaba no sin gentileza, más el pater de turno una vez sobrepasada su altura, el bueno de Justo el "matacuras" se llevaba el índice al cuello y hacía el acto del degollamiento en ademán. Cuando se largó de allí después de muchos años de convivir con cacerolas y aliños el estado le puso un piso. No se porqué pero se lo puso.
El D.R. Lausín era el médico de la obra y no con poco trabajo. Evidentemente, más rojo que Stalin. Según sus cálculos hubo todo tipo de accidentes. Dedos machacados, brazos, piernas, manos y cabezas rotas pero sí es cierto que como testigo de excepción y de oficio solo registró 14 víctimas mortales en su haber. Eso sí, según él de los muertos a la larga por silicosis no tuvo registro. Después de su laboriosa actuación se ganó el mérito de recuperar su plaza de médico y es que según testigos, su labor fue encomiable.
En resumen...... las aventuras y desventuras del Valle de los Caídos parecidas a las de la Pantera Rosa. En mi humilde opinión y al márgen político solo tuvo un gran fallo, el entierro de Franco en ese sitio. Señalaré que no se que pinta ahí ese pro-hombre. Me parece algo patético y encima en un sitio donde nunca debió estar, por propia voluntad y por analogía, de parte del pueblo español. Arias se empeñó, Carmen Polo consintió y el Rey no movió un dedo ya que pasó de todo. Ahora nos vemos inmersos en la mal llamada memoria histórica (España tiene mucha memoria populista para lo que quiere pero peca de pésimos historiadores y de mucho tópico) sin atisbo alguno de resolver nada. Sí..... en cierto modo es una obra faraónica. Pero que pinta ahí un dictador?. Porqué lo enterraron allí en contra de su voluntad?. Porqué tiene que estar con gente del otro bando cuando a no pocos su ejército ejecutó y de forma tan inmoral como lo hizo el otro bando? Y.... si es verdad, que Franco no consintió en canjear a José Antonio por otros presos para salvarle la vida que pinta en frente de él?. Todo un enigma.
Lo que sí es cierto es que el General Franco y en contra de su voluntad fue allí a parar. Sobre José Antonio decir que Franco preguntó antes a la familia Primo de Rivera si estaban de acuerdo sobre su descanso en el Valle. Y es que en realidad en un principio solo se contaba con José Antonio como morador pero al fin y a la postre reposan allí ambos per secula seculorum.
Por lo que a mí respecta señalaré que cuando el General Franco murió en mi casa hubo un gran jolgorio. Mi familia no es que fuera de izquierdas pero sí que mis abuelos y padres estaban hartos de ver siempre al mismo. Ezzzpañolezzz!!!!!!!!. Con estos mimbres, ni cortos ni perezosos en el año 77´ mi familia organizó un viaje al Valle para contemplar in situ la tumba del Caudillo por la Gracia de Dios. Mi abuelo, de natural afable y chistoso no dejaba de comentarme cosas sobre Franco y su piedra (la losa) durante el viaje para que no diera la tabarra en su Seat 850 y tenerme entretenido con historias de abuelo cebolleta y de la quinta del biberón a la que perteneció trabajando de cocinero. Yo creía que Franco estaba debajo de una piedra pero cuando llegué allí me di cuenta de que era una lápida de 1500 kilos y según me explicó mi abuelo salí desengañado ya que no era una piedra gigantesca como mi ignorancia infantil fantaseaba. Es uno de los recuerdos que más grabados tengo a fuego de mi infancia. El Valle de los Caídos. Como obra, y ya a esa tierna edad me quedé deslumbrado, acojonado y me sentí pequeño. Hace 10 años volví a visitarlo y esa sensación de pequeñez me retrotrajo a mis 5 años. Fue un Deja Vú total y absoluto. Un viaje en el tiempo desde los 5 a los 32 que tenía entonces el cual nunca olvidaré. Hoy en día no se en que condiciones está. Pero quiero volver. Señalan los medios que está desatendido y que hay que invertir en no poco para dejarlo conforme Dios manda. Lo que sí es cierto es que está siendo la ruina de muchas empresas de turismo ya que la excursión es Escorial-Valle, y si se prescinde del Valle la gente no coge ninguna de las dos visitas y se lo monta de particular.
Nos guste o no. Es Historia de España. Es así. He visto a lo largo de mi vida grandes monumentos. Las Pirámides, Abu Simbel, Karnak, Luxor, Westminster, Golden Gate, Torre Eiffell, Santa Sofía en Estambul, la Mezquita de Córdoba, la ópera de Budapest, la plaza de Jan Hus de Praga.... pero el Valle es uno de mis favoritos. Y.... no soy franquista si bien se reconocer que hubo cosas las hizo bien. Sencillamente no tengo complejos. Así pues para mí era de obligado cumplimiento cumplir un justo homenaje a uno de los mayores monumentos de España y, en esencia al más sobrio. El Valle de los Caídos. Por ellos y solo ellos España es lo que es. Sufrieron, murieron, se mataron y todo por este portaaviones europeo que es España.
P.D.: Dedicado a todos aquellos infelices que están allí enterrados. Tanto de uno como de otro bando. Sin ellos España no sería lo que es. Pero sí es justo recordar que muchos de ellos combatieron contra el General Franco y que en no poco son compañeros de tumba. Si bien la del dictador por la Gracia de Dios y su filósofo José Antonio ocupan lugar preferente lejos del osario común del resto. Y es que a ellos..... a uno y de otro bando nadie les pone nunca flores. Sencillamente bastantes de ellos sus familias no saben que está enterrados allí.
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